El mundo atraviesa por una de las peores crisis económicas de su historia, originada en las principales potenclas capitalistas, esta crisis ha afectado con brutal severidad a los países subdesarrollados, que experimentan ahora el más grave deterioro económico de toda la posguerra. Los primeros síntomas depresivos se comprobaron a fines de 1979 -precisamente en el periodo en que tuvo lugar la VI Cumbre de Países No Alineados, pero la situación continuo agravándose con particular celeridad y, al celebrarse la VII Cumbre, ha llegado a una calamitosa coyuntura que parece no haber tocado fondo aún y proyecta la más sombría incertidumbre sobre las perspectivas económicas interacionales a corto e, incluso, a mediano plazos. El presente informe se enmarca en este lapso de poco más de tres años (1979-82/83) que separa ambas cumbres, aunque -dadas las complejida des de la situación, deberá extenderse en ocasiones a la consideración de algunos antecedentes que contribuyan a que los Jefes de Estado y de Gobierno puedan acordar, con el mayor sustento posible, en datos compro bados, las líneas estratégicas de acción que requieren tan dramáticas circunstancias.