Este libro reconstruye las raíces que posibilitaron la contribución del portesgilismo al quehacer público y local nacional. Aporta ideas en tres campos del conocimiento de los procesos políticos del México posrevolucionario. Sobre el poder local y regional, sus vínculos, sus mediaciones dentro del nuevo orden nacional. Sobre el corporativismo y los nuevos partidos, formas de mediación y organización modernas. Finalmente, acerca de la autoridad política en la era posrevolucionaria. Al estudiar esta historia y a su figura estelar, el autor explora el surgimiento de un nuevo caudillismo regional en los años posteriores a la revolución armada . Creador, testigo y víctima de la historia que nos atañe , Portes Gil tuvo una compleja trayectoria nacional. Durante su vida pública, recorrió prácticamente todos los cargos de representación y designación en los gobiernos de Tamaulipas y en el nacional: diputaciones, secretarías, hasta la presidencia provisional de México. Participó en la creación de organizaciones que configuraron el nuevo corporativismo mexicano. Fue uno de los políticos más gobiernistas de la nueva era y, paradójicamente , terminó enajenado por ese poder creado con su vigorosa colaboración, que lo relegó como factor político nacional: el presidencialismo.