El libro ofrece un análisis caso por caso de las circunstancias, acciones y reacciones frente a las reformas a la salud y a la seguridad social que se instituyeron en Argentina, Brasil, Chile y México desde fines de los ochenta, y una descripción a grandes rasgos de la situación hoy enfrentada por estos países tras estas reformas. Al principio de los noventa, cada uno de estos cuatro países atravesaba circunstancias distintas: unos revisando las reformas previas, otros instituyéndolas por primera vez; unos reformando en un contexto de crisis, otros en una coyuntura económica favorable. En este proceso se redefinió, una y otra vez, la responsabilidad del Estado frente a la población, particular- mente la de menores ingresos. En el amplio contexto de las políticas de restructuración y estabilización, se llevaron a cabo dos tipos de reformas: las primarias o administrativas que buscaban empequeñecer y capacitar al Estado, y las secundarias de reasignación de recursos y reorganización de servicios públicos hacia los más necesitados. En el primer lustro del siglo XXI, los países de la región enfrentan una situación en la que se reconocen las limitaciones y los vicios de los elementos de políticas sociales generadas en la década del neoliberalismo, pero todavía no se perfila una capacidad política o financiera de corregir las reformas. Sin embargo, el surgimiento, en estos años, de líderes políticos más cercanos a las bases populares y preocupados por el bien- estar de las masas en Argentina, Brasil, Chile y varios países más de la región, hace esperar que una nueva era se esté abriendo, en la cual los gobiernos puedan reconstruir sobre bases sólidas los sistemas de bienestar parcialmente desmantelados durante las décadas del neoliberalismo, pero a la vez incorporen las experiencias y los programas positivos de esa era. Se espera que este libro, al enfatizar los aspectos políticos de las reformas, contribuya a definir las opciones que se abren a principios del siglo XXI.