Las ya numerosas publicaciones del Seminario de Historia de la Vida Cotidiana nos han familiarizado con protagonistas que antes no conocíamos. Han llevado al primer plano a gente que sufría y gozaba como nosotros, y circunstancias que se imponían sin que un héroe o un villano se manifestase como el autor de tal hazaña o de tal ruindad. Los artículos que integran este volumen dan testimonio de fuentes que habían sido desdeñadas y de búsquedas de sentimientos habitualmente ignorados. Vemos los pies de barro de algunos personajes, reconocemos la farsa de no pocas actitudes y descubrimos razones mezquinas, semiocultas por grandilocuentes declaraciones. En esta nueva nave de los locos en la que nos hemos embarcado ahora, caben por igual los modestos vecinos de un complejo multifamiliar y las testas mitradas de quienes ostentaron el poder de la Iglesia; nos sorprenden las debilidades humanas y nos identificamos con las calamidades y los conflictos. Es la historia que nos resulta familiar porque trata de vidas comunes y del acontecer de todos los días.